EL PORTÓN
22.09.2017
Recuerdo que tenía yo trece años cuando mis padres me llevaron por primera vez a La Fonda del Recuerdo, en la colonia Verónica Anzures, que se caracterizaba por ofrecer a los comensales buena comida regional veracruzana y música en vivo con grupos jarochos.
De las pocas franquicias de tortas que, como tales, operan en la Ciudad de México y en su zona conurbada, La Castellana es una de las que se han mantenido por una buena cantidad de años. Las Tortas Locas Hipocampo son otro ejemplo. Pero hay pocas. Curiosamente, el asunto de las torterías en México, que venden un producto tan típicamente...